Manos amadas
armonía en la forma
Mis yemas recorren tus caminos marcan con suavidad la línea de la vida
jugamos al azar
Amarte es amar el destino caprichoso
regalo inesperado,
encuentro en ti el reflejo de mi boca
mordemos ansias y desesperamos miradas
Tu frente junto a la mía
el tiempo no pasa
mientras beso tus piernas
en alevosía
Déjame correr despojada hacia ti
sacar uno a uno los escudos
caer sobre tu risa
Y dormir siempre en tu estrechez
Nikole Weinreich O.